
La historia no es nueva y se ha repetido en varias películas (incluida la moderna "Master and Commander"). Narra una caza del gato y el ratón entre dos buques de guerra. La originalidad es que el duelo es entre un submarino alemán y un destructor americano en medio del Atlántico Sur. Pero sin duda lo mejor de todo es que te muestra los dos lados de la historia.
En el lado norteamericano tenemos una historia tipo “Moby Dick”. Un destructor tiene un nuevo capitán (interpretado por Robert Mitchum). Este capitán tuvo un mando anterior en un destructor que fue hundido por un submarino, así que la tripulación desconfía de él. De hecho, el capitán no se deja ver hasta que la película lleva ya un tiempo. Sin embargo, poco a poco se va ganando la confianza de sus hombres hasta convertirlos en una eficaz tripulación de combate.
En el lado alemán tenemos a una experta tripulación comandada por un capitán (Curd Jürgens) que aunque ha dejado de creer en la victoria final e incluso ha perdido a sus hijos en la guerra, sigue combatiendo porque es su deber para con su patria. En esa tripulación también tenemos al típico nazi que a la hora de la verdad es un cobardica. Es sorprendente que se retrate a los alemanes como humanos después de 12 años de haber acabado la guerra.
Durante la película vemos como la iniciativa de la caza va pasando de uno a otro de los buques con lo que el cazador se convierte en cazado y viceversa. Todo se reduce a una lucha de ingenio de los dos capitanes en el que el premio es su barco y las vidas de los tripulantes. Sin embargo ambos contendientes están muy igualados, por lo que al final la lucha termina en un empate. Aunque dicho resultado cumple el paradigma de todas las guerras, todos pierden. Los dos buques acaban en el fondo del mar.
Dos curiosidades, la primera es que a pesar de usarse maquetas y decorados, gran parte de la filmación se realizó en un autentico destructor de la IIGM. Y la segunda, el guión tuvo mucho éxito y fue reproducido en la serie “Star Trek” en el episodio “El equilibrio del terror” (Balance of terror, 1966). En ese episodio, el capitán Kirk y su nave “Enterprise” hace de destructor estelar y debe de localizar a una nave romulana que dispone de un dispositivo de ocultamiento lo que la convierte en un submarino estelar. Pero en la versión espacial solo la nave romulana es destruida.
9 comentarios:
Buenas
De esta película me quedo con las magníficas interpretaciones de Mitchum y Jurgens; con la (muy exraña en los 50) humanización de los alemanes; y por supuesto con el inteligente guión que va dosificando perfectamente la acción.
Uno de los pequeños clásicos del genero.
Saludos
Acabo de ver un documental sobre la guerra submarina titulado ¨la guerra submarina¨ de la serie Detectives de las profundidades, una especie de respuesta a la serie ¨exploradores del mar¨emitida por el canal National Geographic. Esta información no tendría nada de particular si no fuera por una escena bastante curiosa registrada por los cámaras durante una rutinaria salva de cargas de profundidad. En la filmación en b/n que aparece más o menos por la mitad del documental observé alucinado como la veintena de cargas eran lanzadas en tal orden que reproducían un corazón perfectamente dibujado como con puntos en el cielo. ¿Una casualidad o mensaje de amor a los alemanes? quién sabe pero desde luego sí que esta secuencia mereció ser registrada.
Buenas
Gracias por la información. Como no he visto la escena lo único que se me ocurre es que quizás las cargas se lanzan en circulo y como el barco se mueve en una dirección, dicho circulo se altera en esa dirección.
Saludos
Buenas tardes, Mayor.
Aunque está claro que no se trata de una película de "buenos y malos" (bien por ella), me llamó la atención es que, de acuerdo con el desarrollo de la batalla, quien tenía todas las características de "bueno" era el alemán. Lucha en inferioridad de condiciones, lo vemos dudar, angustiarse y discurrir un plan tras otro hasta que, finalmente, logra herir de muerte a su enemigo. Por su parte, Robert Mitchum aparece como un jefe impasible, que prevé infaliblemente todos los movimientos del submarino (menos el que avería irremediablemente su nave, claro) y sabe responder a ellos con rapidez y eficacia (incluyendo... cuando su nave ya está irremediablemente averiada). El personaje de Jurgens, desaliñado y sudoroso, me resultaba más simpático que el gélido Mitchum.
En cuanto a la humanización y hasta simpatía con que se retrata a personajes alemanes en películas de aquella época (pienso en "Los cañones de Navarone" o en "Tiempo de amar, tiempo de morir"), ¿puede tener que ver con la política de buenas relaciones entre Estados Unidos y la Alemania Occidental, tan necesaria en plena Guerra Fría?
Buenas
Gracias por el comentario Pencroff.
Efectivamente una de las cosas que hace destacable a esta película es que no hay "buenos y malos". Es probable que uno de los motivos sea el que apuntas (los alemanes eran los nuevos aliados). Aunque también es probable el hecho de que en la guerra naval no se cometieron tantas atrocidades como en la terrestre ayudase a elaborar dichos guiones.
Un saludo
Gracias, mayor.
Claro que no había caído en que la guerra naval fue otra cosa. La decencia de los alemanes de esta película o de "La batalla del Río de la Plata" está muy por encima de la de los que salen en otras películas... Debería añadir quizá "El zorro de los océanos", que no he visto pero en la que creo que John Wayne hace el insólito (casi antinatural) papel de marino alemán.
En cuanto a la germanofobia de otras películas de su tiempo, creo que no se limitaba a las de guerra. Dondequiera que aparecía un personaje alemán, era él el antipático o el malo. Siempre me hizo gracia que, en la versión protagonizada por James Mason de "Viaje al centro de la tierra", el sabio alemán de la novela de Verne (Lidenbrock) era transformado en escocés (Lindenbrook). El gran público no debía de aceptar fácilmente héroes teutones.
Buenas
Gracias por el comentario Pencroff.
Si, efectivamente, John Wayne hace de un marino alemán que combatió durante la IGM. Y la verdad es que no lo hace mal, aunque no es uno de sus mejores papeles.
Sobre la germanofobia. Bueno, aún sigue ahí, (Indiana Jones sin ir más lejos), en parte merecidamente. Lo que pasa es que si se abusa de ella uno corre el riesgo de caer en un burdo maniqueismo.
Un saludo
Un saludo,
hoy he conocido este bloc, y me parece estupendo, soy muy aficionado al cine bélico y he intentado informarme de una película antes de bajarla y por ello os he conocido.
Esta película en particular, la he visto recientemente y estoy de acuerdo con los comentarios anteriores, sólo una salvedad:
quien haya visto el submarino u otras películas similares debe notar la falta de realismo en el decorado del submarino alemán. Se ve limpio, sin apenas tuberías y con una operatividad muy superior a los submarinos alemanes de la época, así como muy pocos daños en comparación al castigo sufrido.
Por lo demás la película me parece
muy buena.
Gracias por el bloc y ya iré añadiendo más comentarios por soy un fan de este género.
Buenas
Gracias por el comentario David y bienvenido. Muy bueno el apunte. Supongo que lo hicieron para representar el estereotipo de eficiencia y pulcritud alemana, y también por no desmerecer a los oponentes americanos (queda mal luchar contra un enemigo sucio ;-)
Un saludo
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